Que pueda volver a volar y reintegrarse a su hábitat es el objetivo de los esfuerzos que están realizando diversos organismos en torno al Cóndor Andino que este domingo fue hallado herido en un sector cordillerano de la región de Los Ríos.
Así lo confirmo a Diario de Valdivia el director regional del Servicio Agríçola y Ganadero (SAG) Carlos Burgos, tras una visita este lunes al espécimen macho.
El ave se encuentra bajo vigilancia veterinaria en dependencias de un centro hospitalario animal de la Universidad Austral de Chile.
El cóndor andino fue encontrado con sus alas heridas en un camino público del sector de Auquinco, en las cercanías de Riñinahue, en la comuna de Lago Ranco.
Fueron vecinos de la zona los que hicieron el hallazgo y avisaron de inmediato a Carabineros.
Tras una visita este lunes al Centro de Rehabilitación de la Fauna Silvestre (Cerefas) de Valdivia -donde se encuentra el ejemplar-, el titular del Sag informó que éste ingresó al establecimiento en un estado regular salud.
“Comprobamos que (el cóndor andino) se encuentra en un estado regular de salud; está bastante flaco, demasiado, con baja condición corporal, y con un hematoma en la extremidad anterior izquierda que no le permite volar”, precisó Burgos.
El director del Sag añadió que tras la evaluación de los profesionales del Cerefas, se determinó que el cóndor inicie un proceso de recuperación para que, una vez logrado aquello, pueda ser liberado.
Según consigna National Geographic, el Cóndor Andino -también cóndor de los Cerros, cóndor de los Andes, o simplemente cóndor (Vultur gryphus)-, es una de las aves más grandes de planeta.
Fue adoptada como símbolo nacional de Chile, pero también de Colombia, Ecuador y Bolivia.
Esta ave tiene papeles importantes en la mitología y el folclor de las regiones andinas sur continentales. Sin embargo y pese a ser un emblema multinacional, actualmente se encuentra en serio peligro de extinción.
El Cóndor Andino se cuenta entre las aves más grandes del mundo capaces de volar.
Puede llegar a pesar 15 kilos y sus alas alcanzar tres metros de envergadura. Para mantenerse en vuelo requiere de la ayuda de corrientes de aire, y por eso prefiere zonas altas donde el viento sea abundante para planear sin esfuerzo.
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